Un año más (y ya van...; hemos perdido la cuenta) nos ha visitado Fernando J. López, autor de dos de las novelas más leídas por nuestros alumnos: La edad de la ira y El reino de las Tres Lunas.
Nacido en Barcelona en 1977, se trasladó muy pronto a Madrid. Publicó su primera novela a los diecinueve años y ese mismo año fundó su propia compañía teatral. Profesor de Lengua y Literatura (actualmente en excedencia) y gran conocedor de la problemática adolescente, ha compaginado la docencia con su faceta de novelista y dramaturgo. Fue finalista al Premio Nadal 2010, precisamente con La edad de la ira, una novela que plantea -entre otros temas- el problema de la homofobia en las aulas. Su narrativa (Las vidas que inventamos, La inmortalidad del cangrejo) destaca por su crítico retrato de la sociedad contemporánea. Como dramaturgo, ha estrenado y publicado, entre otros títulos, Cuando fuimos dos, De mutuo desacuerdo o Los amores diversos (actualmente en cartel).
El reino de las Tres Lunas y Los nombres del fuego son, hasta el momento, sus dos incursiones en la literatura infantil y juvenil. A la vista del éxito obtenido, seguramente no serán las últimas. Porque Fernando (lo comprobamos año tras año) conecta a la perfección con los intereses e inquietudes de los adolescentes. Habla su idioma. Sabe contagiar su entusiasmo, su pasión por la literatura, por el cine, por la música, por la cultura. Y ellos le corresponden escuchándole con atención, haciendo preguntas interesantes y maduras. Gracias, Fernando. Ha sido una mañana espectacular. Eres una apuesta segura, así que esperamos volver a contar contigo el año próximo.
El reino de las Tres Lunas y Los nombres del fuego son, hasta el momento, sus dos incursiones en la literatura infantil y juvenil. A la vista del éxito obtenido, seguramente no serán las últimas. Porque Fernando (lo comprobamos año tras año) conecta a la perfección con los intereses e inquietudes de los adolescentes. Habla su idioma. Sabe contagiar su entusiasmo, su pasión por la literatura, por el cine, por la música, por la cultura. Y ellos le corresponden escuchándole con atención, haciendo preguntas interesantes y maduras. Gracias, Fernando. Ha sido una mañana espectacular. Eres una apuesta segura, así que esperamos volver a contar contigo el año próximo.
"Me ha gustado mucho."
"Me ha inspirado en creer en lo que quiero."
"Ha sido como un empujón."
"Me he sentido identificado."
"Me encanta escucharle."